En ‘Vacaciones en Grecia’.
Paul Martin, un papá a prueba de balas
Reconocido actor da vida al patriarca de la familia Berkinson Meier en miniserie que ya se ha ganado la preferencia de los televidentes por las noches.
Renato Arana Conde.
La miniserie ‘Vacaciones en Grecia’ sigue liderando el rating. ¿Dónde crees que radica su éxito?
Es un todo, es el elenco, la producción, el ritmo con el que se cuenta la historia, y eso se traduce en el resultado final.
En la historia eres Martín Berkinson, el patriarca de una familia que se fue a la ruina por engaños…
Él es un personaje muy bacán. Tiene valores muy sólidos y su familia está sobre su fortuna, entonces no se le acaba el mundo cuando sucede eso. Otro de repente habría estado al borde del suicidio. Si está con la familia, va a salir adelante.
Es diferente a lo que te hemos visto hacer en TV últimamente.
En ‘Mi amor, el wuachimán’ mi personaje (Agustín Yrigoyen) era un desgraciado, sin escrúpulos. Pero es interesante porque uno como actor quiere que a sus personajes les pasen cosas. Y, si bien en mi personaje se vive este cambio, su siguiente punto de quiebre tendrá lugar por el episodio dieciocho o veinte. Antes de ese segundo quiebre, Martínestaba llevando la situación “normal”, tratando de salir adelante. A más quiebres, mejor para mí...Por eso dicen que los personajes más desgraciados, locos, que tienen emociones más extremas, son los más ricos.
¿Se cambia la percepción que se tiene de los ricos en ‘Vacaciones en Grecia’?
¡Esa es la idea! Porque en realidad hay de todo como en la misma vida: hay ricos que no han pisado un pueblo joven y viceversa. Lo interesante es acceder a todo, y como actores lo que más necesitamos es no solo pasearnos por diferentes zonas, sino emociones. Puedes ir a un bar diplomático como acudir a un prostíbulo. Una cosa es simular como si fueras malo en una novela y otra cosa es ser un desgraciado hijo de tu madre en una escena.
¿’Vacaciones...’ rompe con lo establecido en cuanto a miniseries por la temática?
Sí, pero en realidad creo que todo ya está escrito. La clave es la forma cómo se cuente. Todas las historias que se ven son historias anteriores que han sido modificadas. Tiene que haber algo sumamente original para que se diga: “¡Esto nunca se ha hecho antes!”.
Hablabas líneas arriba de pasar por diversas emociones como actor. ¿Cuál ha sido la situación extrema a la que te has sometido para darle verosimilitud a un personaje?
En 1989 hice la telenovela ‘Kiatari: Buscando la Luna’, en la que mi personaje era una adicto a la pasta básica de cocaína y me fui con un amigo, que es policía, a la zona de Río Seco de Barranco, donde se vendía pasta. Yo estaba con pelo largo y una barba de seis meses, se me veía con una pinta de pastrulo. Esta experiencia fue muy bacán porque podías vivir lo mismo que esa gente...Obviamente no fumamos.
Ese es el método Stalivnasky, ¿cierto?
Es el mismo método que propone partir de uno mismo, nuestra verdad. Si tienes una escena de carcajada te puedes voltear segundos antes, cerrar los ojos y decirte una frase absurda que te haga reír...o pensar en una situación dolorosa para una escena dura.
¿Esto hace que se te dificulte sacudirte el personaje de encima?
No, yo creo que los actores tenemos esa capacidad de mudar rápidamente. Incluso uno llega a hacer varios personajes a la vez cuando se hace teatro o televisión a la vez.
Hemos visto colegas apoyando el ‘No’ a la revocatoria a Susana Villarán. ¿Qué te parece esto?
Creo que es válido que cada uno exprese lo que siente. Yo no estoy de acuerdo con la revocatoria pese a que el trabajo de Villarán se empezó a ver tarde. Los primeros seis meses fueron para cuestionar a Castañeda y como que fue tiempo perdido en lo que le debió tocar a fiscalización y no a ella. Después empezó a perderse las pilas, obviamente se dice que la gente de Castañeda está detrás para moverla porque de repente es una venganza política.
¿No te animarías a apoyar tu posición?
(Piensa). Ahora no porque estoy full, metido en muchas cosas. Si creo en algo muy fuerte, quizá sí.
Se cuestiona el apoyo de muchas figuras (que apoyan a Villarán) con las cuales el ciudadano de a pie no se identifica.
No sé quiénes están mucho a un lado o al otro, lo que sí te puedo decir es que Lima puede perder mucha plata por eso…y creo que hemos tenido alcaldes peores que Susana Villarán.